El pasado 8 de octubre de 2023 Greg van Avermaet, en las filas del AG2R, decía adiós a una exitosa carrera ciclista: oro olímpico en Río 2016 y ganador de la París Roubaix en 2017, el belga se retiraba tras más de quince años de carrera como profesional.
Pero no se alejaba del deporte, nada más lejos de la realidad. Siguiendo la estela de Alejandro Valverde -que también seguirá Romain Bardet en 2025-, Greg se pasaba al gravel, disciplina en la que este año ha estado compitiendo -en La Traka, entre otras pruebas de primer nivel-.
Pero no se quedaba ahí, y como otros compañeros a los que el triatlón ha llamado tras retirarse, como Laurent Jalabert, Richie Porte o Alexander Vinokourov, van Avermaet puso hace unos meses la mirada en un objetivo: estrenarse en media distancia.
Y ese momento ha sido este fin de semana, durante la celebración de IRONMAN 70.3 Knokke, en la zona de Flandes (donde hasta en cuatro ocasiones hizo podio a lo largo de su carrera como ciclista en Ronde van Vlandereen). Greg ha resuelto su participación con éxito, dado que ha logrado la decimotercera posición en la clasificación y la tercera en su grupo de edad, 35-39, lo que le ha valido el slot para el Campeonato del Mundo de IRONMAN 70.3, que en 2025 se disputará en Marbella.
El mejor segmento ciclista
Greg ha logrado el mejor parcial ciclista de todos los participantes, completando los 90 kilómetros en 2h04′, lo que supone rodar a unos 43,55kms/h. La prueba era plana, con apenas 180 metros de desnivel acumulado a lo largo de todo el recorrido.
En la carrera a pie no se ha quedado atrás, ya que pese a ser el ciclismo su disciplina principal, el que fuera líder del BMC ha necesitado apenas 1h24′ para completar los algo más de 21 kilómetros de que contaba el segmento: a 3’59» el kilómetro.
La natación fue, sin duda, el segmento en el que más sufrió, y pese a ello hizo un tiempo en la línea de gran parte de los inscritos, a 1’45» el cien.